Cada vez más se aleja el sueño de los hinchas de Universidad de Chile de contar con un estadio propio. Es que según publica El Mercurio, el proyecto se encuentra bastante complicado debido al déficit que actualmente tiene Azul Azul.
Durante el año pasado, el club sufrió pérdidas por $2.177 millones, cifra que aumentó en 29,93% en relación con 2014, cuando la institución perdió $1.676 millones.
Y pese a que el miércoles surgió la noticia de que la concesionaria había comprado un terreno en La Pintana, no fue más que una ilusión para algunos fanáticos.
El rotativo asegura que la compra de media hectárea en dicha comuna se realizó en el primer semestre de 2015, cuando el plan aún era abordable para la directiva, pero que actualmente parece ser absolutamente imposible frente a la dificultad de un nuevo aumento de capital, donde se necesitan US$ 10 millones.
Es más, ese incremento que fue acordado para la junta extraordinaria de abril está destinado exclusivamente para intentar acabar con el déficit y que el club pueda funcionar sin problemas el 2016.
