¡Despierta, que queda poco!

Jorge Sampaoli

“A veces sucede que el que juega mejor no siempre gana” estas son palabras de Jorge Sampaoli tras el partido con Uruguay en el Monumental. Es bueno que el DT nacional reflexione sobre esta afirmación. A Chile le pasa mucho esto de jugar mejor que el rival y terminar perdiendo. Desde los tiempos en Universidad de Chile siempre vi muy soberbio al casildense frente a las derrotas, post partidos, en las conferencias de prensa, mostraba un actitud orgullosa y decía como disco rayado “fuimos superiores a nuestro oponente”, aunque hubiese terminado con inferioridad en el resultado. La autocrítica claramente no está entre las virtudes que le aprendió a Bielsa (por lo menos exteriorizada). Estoy de acuerdo con Sampaoli en que, con posesión de pelota y mayor cantidad de llegadas, por lo general se gana. El problema es que a Chile no le ha sido suficiente la intensidad propuesta por el cuerpo técnico argentino.

Gary Lineker decía hace un tiempo “el fútbol es un deporte en el que juegan once contra once durante 90 minutos y al final siempre gana Alemania”, aunque si bien esta sentencia es en tono de caricatura, no esta tan alejada de la realidad. ¿Por qué Alemania es el equipo con mejores records -con 8 finales en los mundiales y tres eurocopas-?. Por muchas razones (obviamente), de las que destaco por sobre todas las demás, su autocritica. Después de la época nazi la nación germana asumió sus errores y aprendió de ellos, esa forma de afrontar la vida la trasladan también a su combinado de futbol nacional. Hacen introspecciones estrictas y aplican las conclusiones.

La intensidad a ultranza, Sampaoli no la practica solo en la cancha. Después del partido con Uruguay, salió con esos ojos abiertos que lo caracterizan y habló con la prensa lo siguiente “manejamos el juego durante los 90 minutos. Jugamos de una forma y la respetamos. No se dio el resultado”. Vuelve a pecar de arrogante. Eso se le perdonaría si hiciera un análisis riguroso, pero para mí es una lectura primeriza que no supera la de un niño de 12 años. Lo digo, básicamente, porque creo que distorsiona el concepto de “manejar el partido”. La Holanda de Van Gaal en el mundial 2014 esperó a Chile todo el partido y salió de contra, mientras que La Roja tuvo posesión del balón y fue dueño del ataque, entonces ¿quién manejó el partido, Holanda o Chile?.

Sampaoli debe bajar las revoluciones, no de la selección sino las de su cabeza, sino en la Copa América a la que llegamos entre los cuatro favoritos, atacaremos mucho pero ganaremos poco. Cuando uno se calma o sosiega ve el panorama en su totalidad, consigue perspectiva y sabiduría. Sampaoli no juega todos los domingos así que hay que exigirle que encuentre las respuestas: a jugar cuando Valdivia este lesionado, a la falta de gol (definición y profundidad), a la permeabilidad defensiva, a la banca, a tener más que de un plan. Basta de encapricharse con solo 11 jugadores, eso no es digno de un estratega. Muy personalmente, me exaspera que meta cambios después del minuto 80.

Que siga con su estilo sampaoliano o como se diga, solo se le pide menos vehemencia. Con las declaraciones terminado Chile-Uruguay, no expresa más que ceguera analítica. Sampaoli está cerca de cerrar un ciclo -empezado por Bielsa- y compactar esa gran selección que todos queremos. El primer y el último paso son los más difíciles, en esto momentos hay mucha ansiedad por conquistar en casa, la primera Copa América para Chile. Por eso, ¡cálmate pelao, cierra los ojos, respira y encuentra las respuestas, que están ahí!.

Sampaoli al parecer no quiere escuchar a los hinchas, a la prensa especializada, a sus colegas, ni a su intuición. Si es que a alguien atiende debe ser a su pepe grillo. A Beccacece siempre se le ve hablándole al oído, así que a ti te digo chascón, recomiéndale un día de SPA a tu amigo, dile que así no ganan la Copa. Vuelvo a repetir, son pequeños pero significativos ajustes los que necesita la selección, todos lo sabemos, también sabemos que si el DT tiene la humildad e inteligencia para hacerlos tenemos altas probabilidades de no dejar irse la Copa América de Chile.