Sería reduccionista decir que Cobreloa, por primera vez en su historia, descendió a la primera B por secretaria.
La institución loína, llamada así por nacer de Deportes El Loa, desciende producto de una nefasta campaña deportiva, un equipo que en 2 años tuvo 6 entrenadores, entre ellos el nefasto Fantasma Figueroa, un técnico ampliamente sobrevalorado y con una personalidad gobernada por las pulsiones.
Ñublense defendía frente a Cobreloa su posibilidad de permanecer en la serie de honor del fútbol chileno, y se notaba un ambiente tenso. Al salir los equipos a la cancha el estadio Nelson Oyarzun rugía… Cobreloa no respeta la formalidad de la FIFA y entró por la salida de su camarín y no por el centro de la cancha y luego al momento de saludarse una muestra de mala educación de los jugadores de Cobreloa que refleja la mano del técnico, nos señaló que este partido no terminaría con 22 jugadores en la cancha.
Los diablos rojos no jugaban solos, dos partidos más se jugaban a la misma hora y comprometían su permanencia en la primera división. El nerviosismo del local se hizo palpable en el primer gol de los zorros del desierto, Cristaldo definió de manera impecable un desborde por la derecha a los 6 minutos. A los 30 minutos de la brega, Jonathan Cisterna pone el 1-1 pero, en el minuto 33 Sanhueza con una patada alevosa sobre Sagredo aparece la primera tarjeta Roja dejando a los mineros con 10 jugadores en cancha. Y, para refrendar lo irresponsable del actuar del “fantasma” el árbitro lo expulsa por reclamar y en un hecho insólito Figueroa toma un micrófono y lanza duros epítetos. Así termino el primer tiempo, en un partido calentito y que se jugó con dientes apretados y con pintura de guerra.
El segundo tiempo partió de favorable al equipo de Chillán, el árbitro de excelente cometido, marcó tiro penal por foul sobre Lorca pero, No pudo ser cambiado por gol por Varas. En el minuto 60 el cuadro naranja se pone en ventaja con gol de Barboza y silencia los 9.823 espectadores del estadio.
Cuatro minutos de tensos silencio fueron quebrados por el grito salgado de gol, los rojos conseguían el empate con gol del volante Riquero tras jugada de balón detenido. Dos minutos más tarde, por la misma vía, Sagredo logra poner en ventaja a Ñublense tras una serie de carambolas en el área del portero Luciano Palos. Mientras tanto, en tribunas, el fantasma seguía con su obra de teatro sensacionalista.
Los resultado que Ñublense necesitaba, no se dieron. San Marcos gano y Antofagasta empato, sellando así la suerte de Ñublense. Cobreloa al ser derrotado sello su destino y posibilidad de apelar por los tres puntos descontados frente a la FIFA.
Cobreloa no desciende por los 3 puntos, que en realidad deberían ser 6. Cobreloa desciende por una crisis a niveldirectivo, técnico y motivacional. Un equipo con 13 copa Libertadores en el cuerpo y 8 torneos nacionales no puede sólo sumar 11 puntos. La cuarta institución con más palmarés en nuestro fútbol no puede sacar un entrenador que dividió un camarín (Figueroa), y después volver a traerlo. Lo anterior es una clara señal de una mala gestión y planificación del club.
Por el momento quedémonos con los mejores momentos del equipo minero, zorros del desierto,loínos o naranjas: Subcampeón de la Libertadores 1981, Subcampeón de la Libertadores 1982; Bicampeón apertura y clausura 2003.
Jugadores emblemáticos del cuadro del Cobre: Marcelo Trobbiani, Héctor Puebla, Juan Covarrubias, Juan Carlos Letelier, Fernando Cornejo, José Luis Díaz, Patricio Galaz, Alexis Sánchez, Eduardo Vargas, Charles Aranguiz, por nombrar algunos.
Algunos frente a la inoperancia de Figuroa se manifestaron “El técnico debe saber qué es lo que viene de acuerdo a la persona que estás contratando, su puede sentarse en la banca o no“, dijo Víctor Merello, recordado ex volante y también ex DT de Cobreloa.
Washington Olivera, jugador emblemático de Cobreloa “el cuerpo técnico “cometió un error imperdonable, pero la directiva también debió darse cuenta antes. Se tienen que ir todos los dirigentes de los últimos años”.
