Alexis Sánchez
Por esto, y cuando ya todos se preparan para recibir al 2017, es momento de hacer una revisión de las actuaciones y el desempeño de varias de las estrellas nacionales durante el año que ya se termina.
Desde su llegada al Arsenal, Alexis Sánchez se transformó en el buque insignia del conjunto que dirige Arsene Wenger, debido a su importancia en el andamiaje del equipo, y durante este año la historia no fue diferente.
Durante la primera parte del año, la que comenzó con una lesión que lo alejó de las canchas durantes varios partidos, el de Tocopilla sostuvo en varias ocasiones a la escuadra “Gunner”, que terminó en el segundo puesto de la temporada 2015-2016, a diez puntos del Leicester City. El “Niño Maravilla” sumó ocho goles, repartidos entre Premier League (7) y Copa FA (1).
No obstante, Wenger tenía planeados ciertos cambios para el formado en Cobreloa con miras al inicio de la liga inglesa 2016-2017. El estratego francés optó por alejar de las bandas al nacional, y ubicarlo como centrodelantero, en una decisión mirada de reojo por los medios y los hinchas en el Reino Unido.
Pero Alexis, lejos de sentir el rigor de su nueva tarea dentro del campo, siguió haciendo lo que mejor sabe: goles y más goles, con los que reafirmó su condición de líder en el equipo de Londres. Hasta la fecha, figura en la parte alta de la tabla de goleadores de la Premier League con 12 dianas, además de las dos que ha marcado por la Champions League.
Sin embargo, el gran misterio que se ha levantado durante los últimos meses en torno al ‘7’ es su renovación contractual con Arsenal. En primer término, el atacante criollo no aceptó las condiciones propuestas por el club para extender el vínculo, por lo que los rumores están a la orden del día en cuanto a una posible partida del ex Barcelona.
Hay versiones que hablan de una millonaria oferta del fútbol chino, e incluso Manuel Pellegrini, quien dirige en ese país, avisó medio en broma medio en serio que “si quiere, lo llevamos rápidamente a un club de China”. Juventus, Manchester City e Inter de Milán también estarían en la grilla de largada para quedarse con Sánchez, en caso de que decida partir. ¿Qué determinación tomará? Solo él lo sabe.
No cabe duda alguna de que Arturo Vidal tiene una mente ganadora, además de las capacidades futbolísticas que lo acompañan. No es raro verlo constantemente declarando que pretende ser campeón del mundo con la Selección chilena, por ejemplo. Pero el formado en Colo Colo, desde su arribo a Europa, tiene una gran meta: conquistar la Champions League.
Ya en la temporada 2014-2015 el volante nacional estuvo cerca de la gloria, cuando con la Juventus llegó hasta la final del certamen, pero sólo se tuvo que conformar con la medalla de plata, luego de caer 3-1 ante el poderoso Barcelona.
Y en el año que se va, esta vez con el Bayern Múnich, Vidal también quedó cerca de transformarse en el primer chileno en cancha en ganar la “Orejona”, pero en la etapa de semifinales debió despedirse tras inclinarse ante el Atlético Madrid.
Sin embargo, la frustración de quedarse al margen en el torneo de clubes más importante del mundo se vio atenuada de cierta forma con la obtención de su primera Bundesliga, además de los trofeos de la Copa de Alemania, y la Supercopa de Alemania, donde en ambas finales vencieron al Borussia Dortmund.
Pese a que bajó de cierta forma su cuota goleadora, ya que solo marcó siete goles en el año para los bávaros, la llegada de Carlo Ancelotti al Bayern en reemplazo de Josep Guardiola le ha dado al “Rey” un poco más de protagonismo, pese a que hace unos días el propio DT italiano reconoció que su nivel no era el más alto.
Con miras al 2017, Arturo Vidal y el Bayern Múnich tienen en mente el gran objetivo de quedarse con la Champions League. El chileno quiere seguir soñando en grande. Mal que mal, nació para hacer historia.
Claudio Bravo
El año de Claudio Bravo estuvo plagado de altos y bajos, y también de cambios. Y es que la primera parte del 2016, aún en Barcelona, el arquero aún lidiaba con la competencia con Marc-André Ter Stegen, y con la casi desesperante desidia de Luis Enrique, quien jamás dejó claro cuál era el verdadero rol del chileno en el equipo.
Pese a esto, el capitán de la Selección chilena se mantuvo con la titularidad en La Liga, y a muy buen nivel, aportando de forma notoria a que los culés se quedaran con La Liga 2015-2016, pese a que el guardameta no pudo estar presente en las dos últimas fechas por una lesión.
Ya con el fin de la temporada europea, y mientras el formado en Colo Colo participaba en la Copa América Centenario, a la que estuvo a punto de no asistir por problemas familiares, los rumores de un posible cambio de aires comenzaron, con el Manchester City como principal candidato para quedarse con sus servicios.
Finalmente, el 25 de agosto el conjunto inglés anunció de forma oficial la llegada de Bravo al cuadro de Josep Guardiola. Nuevo equipo, nueva vida. Y también, nuevos problemas, ya que durante los meses que el portero ha estado en el cuadro británico, ha tenido que lidiar con las críticas de los medios.
Incluso desde su debut en el arco de los “ciudadanos”, nada menos que ante el Manchester United en Old Trafford, el 10 de septiembre, el seleccionado criollo fue apuntado como principal responsable en el tanto que marcó Zlatan Ibrahimovic para los “Diablos Rojos”, pese a que se quedaron con la victoria (2-1).
Los cuestionamientos para Bravo han ido de la mano con el irregular rendimiento que ha exhibido el Manchester City en la primera parte de la campaña, ya que pese a clasificar a octavos de final en la Champions League, lo hizo en segundo puesto, y en la Premier League marchan en el tercer casillero, a siete unidades del líder Chelsea.
No obstante, ni las críticas ni los cuestionamientos han mermado la actitud del arquero nacional, quien sigue demostrando fin de semana tras fin de semana que está entre los mejores guardavallas del mundo, y que nada le ha sido regalado. Seguramente el Manchester City va a pelear en todos los frentes, y Bravo estará siendo protagonista.
Ya desde la llegada del portugués Paulo Sousa como entrenador de la Fiorentina, Matías Fernández había perdido protagonismo luego de ser relegado a la suplencia, aunque se las arregló de todas formas para marcar un tanto, y entregar cuatro asistencias.
Tras haber resignado su puesto dentro del plantel, y sabiendo que no iba a contar con los minutos deseados, el formado en Colo Colo buscó nuevos horizontes, y en ese escenario apareció un gigante de Europa: el Milan.
El 31 de agosto se anunció que el mejor jugador de América el 2006 arribaba al conjunto rossonero a préstamo por un año, bajo la tutela de Vincenzo Montella, quien ya lo había dirigido en el elenco viola, y lo tiene como uno de sus preferidos.
Sin embargo, ni bien arribado al histórico cuadro, comenzó el padecimiento de “Matigol”. El 6 de septiembre sufrió una lesión muscular en el muslo izquierdo a poco de haber ingresado en el choque de la Selección chilena ante Bolivia por las Clasificatorias, e incluso salió entre lágrimas.
Dos meses después, el 6 de noviembre, el volante criollo hizo su esperado debut con la camiseta de su nuevo club, ingresando en el segundo tiempo en la victoria 2-1 del Milan ante Palermo, pero luego de sumar algunos duelos ingresando desde la banca, volvería el fantasma de las dolencias físicas.
Esto porque el 26 de noviembre, en su debut como titular ante el Empoli, Fernández sólo pudo estar diez minutos en la cancha, para luego retirarse con una contractura en el aductor de la pierna derecha, la cual la tendrá fuera de competencia hasta el 2017.
Finalmente, Matías pudo dar el gran salto para pasar a un equipo con mayores expectativas, y que incluso hace poco disfrutó del título de la Supercopa ante la Juventus, luego de seis temporadas sin dar vuelta olímpica alguna. Es de esperar que el próximo año el nacido en Caballito pueda demostrar, en la cancha y sin lesiones, que está a la altura en uno de los equipos más importantes del mundo.
Luego de su polémica salida de Huracán de Argentina, cuadro que lo demandó por incumplimiento de contrato, el iquiqueño recaló a comienzos de año en la Liga Deportiva Universitaria de Quito, cuadro que en ese momento era dirigido por Claudio Borghi.
Pese a que el ex adiestrador de la Roja siempre le dedicó elogios, Puch no pudo devolver la confianza con muchos goles, ya que sólo metió cuatro en 20 partidos, aunque en el segundo semestre vendría su explosión definitiva.
Luego de realizar un buen cometido en la Copa América Centenario con la Selección chilena, el formado en Huachipato se enroló en las filas del Necaxa mexicano, club que vería el renacer de quien en sus ratos libres se dedica a la música urbana, bajo el seudónimo de “Comando”.
Y es que el extremo se transformó en baluarte en un equipo en el que también están los chilenos Manuel Iturra, Marcos González, Luis Felipe Gallegos, y ahora Nicolás Maturana. Con 10 goles en 21 partidos, además de una racha de cinco encuentros marcando de forma consecutiva, Puch fue la figura de un equipo que llegó a semifinales del Torneo de Apertura mexicano.
Ya con 30 años, el delantero vive uno de los mejores momentos de su carrera, cosa que pretende extender para este 2017 en tierras aztecas, con la esperanza de ser considerado para la Copa Confederaciones, y en caso de una hipotética clasificación a Rusia 2018.
Además, como colofón del año, junto a la Selección chilena tanto Sánchez, Vidal, Bravo y Puch, lograron el gran objetivo de ganar la Copa América Centenario, y están en zona de clasificación a la Copa del Mundo. Sólo queda esperar que el 2017 esté plagado de buenos momentos para éstas, y el resto de las figuras que nos representan en el extranjero.
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